En el primer ronda del torneo baloncesto NCAA, el numero doce Western Kentucky venció el numero cinco Illinois. La estrella del partido fue Orlando Mendez-Valdez, un mexicano que mide 1.85 metros. No es común que un mexicano juegue al baloncesto en la primera división del baloncesto en una universidad. Él crecio en un barrio malo y un hermano era arrestado por matar y un otro hermano era arrestado por el narcotrafico. Su mamá le pidió que el entrendador Valdez adoptara a su hijo para que escapara del barrio malo. Valdez lo crió y lo enseño a jugar al baloncesto. Mendez-Valdez, quien es el hijo de immigrantes mexicanos, era ofrecido solamente una beca por la universidad Texas State, pero en vez de darle a él, le dio a un otro jugador. Sin embargo Mendez-Valdez no se dio por vencido y juegaba por el colegio Charis Prep en Goldsboro, NC. Se ofreció una beca para jugar al baloncesto por Western Kentucky el proximo año, pero Mendez-Valdez no era en la primera selección para lost partidos hasta su cuatro año de asistir la universidad este año. Se eligió el mejor jugarador de la división. Ahora cuando visite lugares públicos, se reconoce por una insipiración para los jóvenes hispanos que queren jugar al baloncesto.
Es increíble que una persona con un fondo como esto podía realizar sus metas en vida. Su equipo, WVU, ha jugado muy bien en el torneo de NCAA y ha marginado en los jugadores fuertes como Mendez-Valdez. Fui a Texas State la semana pasada, y me gusta este lugar mucho, pero ¡espero que los Tarheels ganen el torneo!
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